Cuerpo a los 40: Reflejo de un Estilo de Vida

Ciertamente al llegar a los 40 ya no perdemos peso tan rápidamente y tanto la piel como los músculos no lucen tan tonificados como nos gustaría. Nuestro cuerpo no es el mismo de los 20 debido a muchas razones fisiológicas, pero existen varias maneras para combatir esas libras que ganamos pasados los 40.

¡Olvidémonos de esas excusas de que por la edad, por haber tenido hijos, por no tener tiempo o como fue mi caso, estar sometida en poco tiempo a 4 cirugías que imposibilitaron el hacer ejercicios! Porque son solamente eso:  excusas que nos impiden realizar los cambios necesarios.

Cada cual es feliz a su manera y nadie debe adherirse a los cánones físicos impuestos por la moda.   Pero, si eres de esas personas que traspasaste el umbral de los 40 y vives frustrada cuando te miras al espejo ¿no crees que llegó el momento de tomar riendas en el asunto?

Lo más importante es mantenernos saludables e incorporar ejercicios a nuestra rutina.

Nuestro objetivo principal  es mantener el tono de los músculos y realizar actividades que ayuden a drenar y a estimular el consumo de calorías.

Existen muchas alternativas además de los aeróbicos y las pesas. Están las clases de zumba, fitbox, el spinning , etc.   Notarán que no incluyo el Crossfit en esta categoría dado que esta disciplina puede requerir demasiada dedicación y esfuerzo y resultar contraproducente.

Así que existen muchas opciones para cada caso.   Se trata de analizar la rutina que mejor se adapte a nuestro estilo de vida y comprometerse.  Algunas opciones son caminar enérgicamente 20 minutos al día, montar bicicleta, nadar, dejar el carro y caminar distancias razonables o, como hago yo, patinar.  La lista es larga pero no debe comprometer varias horas diarias.

Pero, por experiencia propia, aseguraría que las mejores aliadas para fortalecer músculos y huesos y combatir la flacidez, son las pesas.  La semana anterior,  le dediqué una nota al respecto en mi artículo titulado “¡Renuévate con las Pesas!”.

Si tomas la decisión de realizar cambios en tu cuerpo, será importante que lo hagas por lo menos 3 veces a la semana, solo así conseguirás ver los resultados sobre tu figura y tu estado de ánimo.

La alimentación juega también un papel importante y lo que comemos se traduce en resultados positivos o negativos según la calidad de la alimentación.  Les repito un consejo sabio:  Tengan siempre en cuenta tres factores: calidad, cantidad y frecuencia. Nada de comida rápida, den la bienvenida a los vegetales, a las proteínas y a las grasas saludables (almendras, frutos secos y aceite de oliva extravirgen). Eviten los carbohidratos refinados, como el pan o el arroz blanco y si no puede dejarlos pues ingiéralos ocasionalmente.

Nada de  azúcar refinada,  ni endulzantes artificiales; se pueden reemplazar por uno orgánico como Stevia . También es importante ingerir las comidas en proporciones adecuadas y no exagerar aunque se trate de comida saludable.

Un truquito que no falla:  se cubre la mitad del plato con vegetales, un cuarto con proteínas y otro cuarto con carbohidratos bajos en índice glicémico, como pastas o legumbres y el resultado es una comida ideal!

 Tuve que aprender a comer cinco veces al dia ¿suena raro verdad? Pero no tanto,  porque es necesario comer seguido para activar el metabolismo y para no llegar con tanta hambre a la siguente comida. Eso sí, los snacks de media mañana o media tarde nunca deben superar cien calorías.

Mis snacks preferidos son las almendras, las naranjas y las manzanas. Dan una sensación de llenura y quitan la ansiedad.

Al final somos lo que comemos y definitivamente el cuerpo refleja el estilo de vida…

Foto: José Chiari.        Nutrición: Javier Bernard, BH Clinic.     Trainer: Rolando Allen.